Día 63. Northridge.

Hoy me fui con Stella ¿Os acordáis de Stella? Pues me fui con ella a Nortridge. Porque resulta que el otro día me preguntó si me gustaba la comida china. Yo le contesté que no estaba muy seguro de si sí o si no, porque en España tenemos restaurantes chinos, pero no estoy muy seguro de que lo que pongan sea en realidad comida china. Que a mí me daba la sensación de que eran un producto inventado con alguna idea de China, pero que en realidad eso no se lo comería un chino. Entonces ella me dijo que conocía un restaurante en Northridge que ponían comida china de la de verdad. Así que quedamos en ir hoy allí a comer, lo que pasa es que al final se convirtió en ir a cenar. Yo aproveché para echar un vistazo al barrio porque es uno de los que barajaba (hasta hoy) para irme a vivir en caso de encontrar algo. Aunque estoy prácticamente decidido a quedarme con el que vi en Hollywood. El caso es que una de las cosas que no quiero que pasen en mi barrio es que viva gente que no sepa hablar el inglés. Se me haría raro tener un vecino con el que no me pudiera comunicar. Bueno es que sea alguien que acaba de llegar, entonces sí, pero si es un vecino de muchos años, pues que sepa el idioma.

El caso es que íbamos caminando por la calle y de pronto encontramos un bloque (bastante cutre) que ponía que se alquilaban pisos. Me dio por preguntarle a una mujer que había por allí que si sabía algo del piso cuanto costaban y como estaban y eso, no me supo contestar en inglés. Debía ser mejicana o algo así y al final terminamos hablando en español y para colmo, el más barato estaba a $900. Así que ella insistió mucho en que llamara al teléfono que había allí, pero no pienso llamar. Luego ya me di cuenta de que la mayoría de la publicidad y los carteles de las tiendas estaban en español. Como en el primer apartamento que vi.

En fin, que en esas estamos. Luego cuando fuimos a coger el autobús de vuelta resultó que ya había pasado el último y tuvimos que cambiar el itinerario de vuelta y coger un metro y luego coger otro metro y luego coger un autobús. Pero el primer metro fue muy divertido, porque resulta que cualquiera que lo vea diría que es un autobús normal y corriente, pero se mueve por una especie de calle en la que solo puede pasar él. Completamente cerrada al tráfico. Yo me imaginé que en un principio querrían hacer un tranvía, se quedarían sin presupuesto para comprar vías o trenes y dijeron: Pues ya que lo tenemos, asfaltamos esto, y metemos un autobús por aquí. Y eso hicieron.

Y ya está, que con la cosa de cambiar el itinerario nos tiramos tres horas para hacer un viaje que se haría en una.
Así que, evidentemente, me he retrasado.

:)
Y hoy no estoy escuchando nada, pero igualmente os puedo poner un enlace a algo...
Ea, esto mismo