18 marzo 2012

De concierto...¿4?

Pues nada, que hoy he tenido otra vez con mi coro. Yo pensaba de todas formas dedicar el día a descansar y no hacer nada. Lo he empezado bien, levantándome como a las 10:30. Pero luego me han llamado que si podía ir a una reunión secreta de mi proyecto secreto n. 2, y entonces pues me he tenido que ir medio deprisa y corriendo. No mucho, vaya, he tenido tiempo de comer y esas cosas.

Total, que después de la reunión, que ha sido productiva me he ido a la universidad, que es donde teníamos el concierto, y cuando he llegado me he dado cuenta de que me había dejado la carpeta negra en casa, pero la tienda de la universidad estaba cerrada, así que he tenido que llamar a una compañera a ver si me acercaba una, pero bien.

Y eso, luego el concierto, que lo hemos hecho dos veces, que esta vez estaba totalmente integrado por repertorio en español, lo cual ha sido divertido, escuchando el acento raro de esta gente (luego ellos se divertirán con el mío, digo yo). Y nada, en medio del concierto, un cuarteto de guitarras ha tocado una versión de La danza del molinero, de Falla, lo que me ha hecho sentir morriña, pero que le vamos a hacer...


Y luego esperando al autobús se me ha acercado un chico para preguntarme cuando salía el ultimo autobús para Hollywood. Y menos mal que estaba yo ahí, porque estaba esperando el autobús en la dirección contraria. Así que se ha venido conmigo hasta casa, porque se alojaba en el hostal de enfrente de mi casa. Muy majo el chaval, Coreano, que el pobre o no había escuchado hablar de St. Patrick en su vida, y cuando ha empezado a subirse al autobús gente un poco más bebida de la cuenta vistiendo de verde, pues se ha quedado un poco rallado. Ya le he contado yo de que va, y el me ha dicho que en Corea nunca han celebrado algo así.

En fin, que eso ha sido todo por hoy. Mañana, más.



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Raro, raro. Los irlandeses son como los gallegos; están en todos los sitios.
A lo mejor no le suena la celebración pero tenías que haberle dicho lo de que, aunque no los viera seguro que "...habelos hainos"
me

Anónimo dijo...

No es extraño que sintieras morriña.
Incluso para los que estamos anclados en estos andurriales, escuchar Falla y concretamente esa pieza nos transporta a Córdoba, a sus calles y patios, esa luz, esos aires. Además, es una suerte que sea así. Se disfruta mas de la música.

Botamino